Las tuberías más comunes para el transporte de líquidos y gases son las de hierro negro y las galvanizadas. Dado que ambas están hechas de acero, pueden parecer muy similares. Sin embargo, existe una diferencia entre las tuberías de hierro negro y las galvanizadas.
Aquí encontrará una breve explicación de las propiedades de las tuberías de hierro negro y las tuberías galvanizadas para ayudarle a elegir la opción adecuada. Siga leyendo para obtener más información.
Resistencia a la corrosión
La principal diferencia entre las tuberías de hierro negro y las galvanizadas radica en su resistencia a la corrosión. El hierro negro se fabrica con una aleación de acero dulce que contiene poco carbono. La inclusión de carbono mejora aún más la resistencia a la corrosión del acero dulce. Las tuberías galvanizadas, por otro lado, están protegidas por una capa de zinc. La galvanización es el proceso de recubrir las tuberías con esta capa, lo que les confiere una excelente resistencia a la corrosión. Además, la galvanización ayuda a prevenir la acumulación de depósitos minerales que podrían obstruir las tuberías.
Proceso de fabricación
Otra diferencia clave entre las tuberías de hierro negro y las tuberías galvanizadas es el método de producción. Las tuberías de hierro negro se fabrican estirando el acero para formar tubos sin soldadura o uniendo los bordes mediante soldadura.
La lámina de hierro de las tuberías galvanizadas se sumerge en zinc fundido a alta temperatura. El zinc se calienta a temperaturas que oscilan entre 820 y 860 grados Fahrenheit. Tras el recubrimiento, se enfría en un tanque de enfriamiento para eliminar cualquier impacto ambiental negativo del nuevo recubrimiento.
Apariencia
En comparación con las tuberías galvanizadas, las tuberías de hierro negro son más oscuras. El color grisáceo se debe al óxido de hierro que se forma durante el proceso de producción. Gracias al proceso de galvanización, las tuberías galvanizadas tienen un aspecto blanco plateado. Al pintarlas, el recubrimiento de zinc proporciona una superficie más lisa y de mayor calidad.
Aplicaciones
Ambos tipos de tuberías poseen propiedades únicas que las hacen excelentes para usos específicos. Debido a que las tuberías de hierro negro no tienen soldadura continua, son la mejor y más segura solución para el transporte de gas natural y propano. Además, al ser más resistentes al fuego que las tuberías galvanizadas, se utilizan con frecuencia en sistemas de rociadores contra incendios.
Las tuberías de hierro negro se oxidan rápidamente al exponerse al agua. Aquí radica la utilidad de las tuberías galvanizadas. Durante más de 30 años, se han utilizado principalmente para el transporte de agua a la infraestructura de abastecimiento. Gracias a su resistencia a la corrosión, también se emplean en diversas aplicaciones industriales y exteriores. Algunos ejemplos de uso son barandillas, estructuras de andamios, cercas, tuberías de drenaje, señalización vial y riego agrícola.
Durabilidad
Si bien el acero es bastante duradero, las tuberías galvanizadas poseen mayor resistencia gracias a su recubrimiento protector de zinc. Este recubrimiento absorbe los daños en lugar del acero, y se oxida desde el interior hacia el exterior. Esto preserva la integridad de la tubería galvanizada, extendiendo su vida útil hasta 40 o 50 años. Además, las tuberías galvanizadas son resistentes a la rotura y a la abrasión. En cambio, las tuberías de hierro negro no tienen recubrimiento y, por lo tanto, son menos duraderas. Además, el agua corroe este tipo de tuberías con facilidad.
Costo
Las tuberías de hierro negro son más económicas que las galvanizadas. Esto se debe a que no tienen recubrimiento de zinc. En su lugar, se recubren con óxido de hierro durante todo el proceso de fabricación. Si su presupuesto es ajustado y la durabilidad no es una prioridad, elija tuberías de hierro negro en lugar de galvanizadas.
Fecha de publicación: 21 de abril de 2022