La variedad de tratamientos superficiales del acero inoxidable amplía su campo de aplicación: los diferentes tratamientos superficiales hacen que la superficie del acero inoxidable sea diferente, lo que lo convierte en un material único para su aplicación.
Acabado superficial detubería de acero inoxidablees importante por muchas razones en las aplicaciones arquitectónicas.
Los entornos corrosivos requieren superficies lisas, ya que estas no se ensucian fácilmente. La acumulación de suciedad puede oxidar e incluso corroer el acero inoxidable. En los grandes salones, el acero inoxidable es el material más utilizado para los paneles decorativos de los ascensores. Si bien las huellas dactilares se pueden limpiar, afectan la apariencia, por lo que es mejor elegir una superficie adecuada para evitarlas. Las condiciones higiénicas son cruciales para muchas industrias, como la alimentaria, la hostelería, la cervecera y la química. En estos sectores, la superficie debe ser fácil de limpiar a diario, y con frecuencia se utilizan productos químicos de limpieza. El acero inoxidable es el material ideal para ello. En lugares públicos, es común que las superficies de acero inoxidable se manchen con garabatos. Sin embargo, una de sus propiedades importantes es que se pueden lavar. Esta es una característica destacable del acero inoxidable frente al aluminio. Las superficies de aluminio tienden a dejar marcas difíciles de eliminar. Al limpiar la superficie de acero inoxidable, se debe hacer siguiendo la dirección del material, ya que algunas líneas de acabado son unidireccionales. El acero inoxidable es ideal para hospitales y otros entornos donde la higiene es fundamental, como la industria alimentaria, la restauración, la elaboración de cerveza y la industria química, no solo por su fácil limpieza diaria, incluso con productos químicos, sino también porque dificulta la proliferación de bacterias. Diversos estudios han demostrado que su rendimiento en este sentido es comparable al del vidrio y la cerámica.
1. La apariencia natural del acero inoxidable tiene un aspecto sólido y natural, con colores naturales que reflejan suavemente los colores de su entorno.
2. Tipos básicos de tratamiento superficial Existen aproximadamente cinco tipos de tratamiento superficial que se pueden utilizar para el acero inoxidable, y que pueden combinarse para transformar una mayor variedad de productos finales. Los cinco tipos son: tratamiento superficial por laminación, tratamiento superficial mecánico, tratamiento superficial químico, tratamiento superficial texturizado y tratamiento superficial de color. También existen acabados especializados, pero cualquiera que sea el que se especifique, se deben seguir los siguientes pasos:
①Acuerdo con el fabricante sobre el procesamiento de superficie requerido, es mejor preparar una muestra como estándar para la futura producción en masa.
2. Cuando se utilice en una superficie grande (como paneles compuestos), debe asegurarse que las bobinas base o las bobinas utilizadas sean del mismo lote.
③ En muchas aplicaciones arquitectónicas, como por ejemplo el interior de los ascensores, aunque las huellas dactilares se pueden limpiar, resultan muy antiestéticas. Si se elige una superficie texturizada, el efecto es menos evidente. El acero inoxidable pulido no debe utilizarse en estos lugares delicados.
④ Al seleccionar el tratamiento superficial, debe tenerse en cuenta el proceso de producción. Por ejemplo, para eliminar los cordones de soldadura, es posible que se rectifique la soldadura y se restaure el acabado superficial original. Las placas antideslizantes presentan dificultades, o incluso imposibilidad, para cumplir este requisito.
⑤ En algunos procesos de acabado superficial, las líneas de pulido o rectificado son direccionales, es decir, unidireccionales. Si la textura es vertical en lugar de horizontal, la suciedad no se adherirá fácilmente y será más fácil de limpiar.
⑥ Independientemente del tipo de proceso de acabado que se utilice, este requiere más pasos, lo que incrementa el costo. Por lo tanto, es fundamental elegir cuidadosamente el tratamiento superficial. En consecuencia, el personal pertinente, como arquitectos, diseñadores y fabricantes, debe comprender el tratamiento superficial del acero inoxidable. Mediante una cooperación cordial y una comunicación fluida, se logrará el resultado deseado.
⑦Según nuestra experiencia, no recomendamos el uso de óxido de aluminio como abrasivo a menos que se tenga mucho cuidado durante su uso. Es preferible utilizar abrasivos de carburo de silicio.
3. Acabado superficial estándar Muchos tipos de acabado superficial se han representado mediante números u otros métodos de clasificación, y se han incorporado a normas relevantes, como: “British Standard BS1449” y “American Iron and Steel Institute Stainless Steel Producers Committee Standard”.
4. Acabados superficiales laminados Existen tres acabados superficiales laminados básicos para placas y flejes, que están representados por el proceso de producción de la planta de placas y flejes.
N.° 1: Tras el laminado en caliente, el recocido, el decapado y el desincrustado, la superficie de la chapa de acero tratada es mate y algo rugosa.
N.° 2D: Mejor acabado superficial que el N.° 1, pero también superficie mate. Tras laminado en frío, recocido, decapado y, finalmente, laminado ligero con rodillos de superficie rugosa.
N.° 2B: Este es el tipo más utilizado en aplicaciones arquitectónicas. Salvo por el último laminado en frío ligero con rodillos de pulido tras el recocido y el decapado, los demás procesos son idénticos al 2D. La superficie es ligeramente brillante y se puede pulir.
N.° 2B Recocido Brillante: Este acabado reflectante se obtiene mediante un proceso de laminado en frío pulido y recocido final en atmósfera controlada. El recocido brillante mantiene la reflectividad de la superficie y no produce óxido. Dado que no se produce oxidación durante el proceso de recocido brillante, no se requiere decapado ni pasivado.
5. Procesamiento de superficie pulida
N.° 3: representado por 3A y 3B. 3A: La superficie está rectificada uniformemente y el tamaño de partícula abrasiva es de 80 a 100. 3B: La superficie rugosa está pulida y presenta líneas rectas uniformes.
N.° 4: Acabado superficial unidireccional, poco reflectante; probablemente el más versátil en aplicaciones arquitectónicas. El proceso consiste en pulir primero con abrasivos gruesos y, finalmente, rectificar con abrasivos de tamaño de partícula 180.
N.° 6: Es una mejora del N.° 4, que consiste en pulir las superficies con un cepillo de pulido Tampico en medio abrasivo y oleoso. Este acabado superficial no está incluido en la norma británica BS 1449, pero sí en la norma estadounidense. N.° 7: Se denomina pulido brillante y consiste en pulir la superficie que ha sido desbasada muy finamente pero que aún presenta marcas de desgaste. Generalmente, se utilizan tableros 2A o 2B, con ruedas de pulido de fibra o tela y las pastas de pulido correspondientes.
N.° 8: Superficie pulida a espejo con alta reflectividad, conocida como acabado espejo debido a la nitidez de la imagen reflejada. Se trata de un pulido continuo de acero inoxidable con abrasivos finos, seguido de pastas de pulido muy finas. En aplicaciones arquitectónicas, cabe destacar que si esta superficie se utiliza en zonas de mucho tránsito o donde se toca con frecuencia, quedarán marcadas las huellas dactilares. Si bien estas huellas se pueden limpiar, en ocasiones afectan a la estética. Los acabados superficiales descritos en las normas y publicaciones oficiales son solo introducciones generales; las muestras son la representación más intuitiva del tipo de acabado. Los fabricantes de productos para pulido o acabado de metales ofrecen muestras de diversos acabados superficiales, y se recomienda a los usuarios consultar con ellos.
6. Rugosidad superficial. La clasificación de los procesos de laminado y pulido superficial indica el grado de rugosidad que se puede alcanzar. Otra forma eficaz de expresarlo es midiendo la rugosidad superficial. El método estándar de medición se denomina CLA (Promedio de la Línea Central), donde el medidor se desplaza sobre la superficie de la placa de acero, registrando la magnitud de los picos y valles. Cuanto menor sea el valor de CLA, más lisa será la superficie. Los resultados de los diferentes grados se pueden observar en la tabla siguiente, junto con los acabados superficiales y los valores de CLA.
7. Pulido mecánico
Una advertencia: Es importante recordar que el esmerilado con papel de lija o bandas abrasivas es esencialmente un proceso de pulido que deja marcas muy finas en la superficie de la placa de acero. Hemos tenido problemas con la alúmina como abrasivo, en parte debido a la presión. Ninguna pieza del equipo utilizada para el esmerilado, como bandas y muelas abrasivas, debe usarse previamente con otros materiales que no sean acero inoxidable, ya que esto contaminaría la superficie. Para garantizar la uniformidad del acabado superficial, se recomienda probar primero la nueva muela o banda abrasiva en un trozo de material de la misma composición, de modo que se pueda comparar con la misma muestra.
8. Electropulido. Este proceso de eliminación de metal utiliza acero inoxidable como ánodo en una solución electrolítica. Al aplicar una corriente eléctrica, se elimina el metal de la superficie. Se emplea frecuentemente en componentes de formas difíciles de pulir con métodos tradicionales. Es común usarlo en la superficie de láminas de acero laminadas en frío, ya que su superficie es más lisa que la de las láminas laminadas en caliente. Sin embargo, el electropulido hace más visibles las impurezas superficiales, especialmente en materiales estabilizados con titanio y niobio, donde las impurezas granulares pueden generar irregularidades en la zona de soldadura. Este proceso permite eliminar pequeñas marcas de soldadura y bordes afilados. Se centra en las partes sobresalientes de la superficie, disolviéndolas preferentemente. El electropulido consiste en sumergir el acero inoxidable en un líquido caliente, cuya composición depende de diversas tecnologías patentadas. Es efectivo para el acero inoxidable austenítico.
9. Procesamiento de superficies texturizadas: Se pueden utilizar muchos tipos de patrones para el acero inoxidable. Las ventajas de añadir un patrón o una superficie texturizada a la placa de acero son las siguientes:
① Reducir el efecto de pandeo, término que describe la superficie de materiales brillantes que no es plana desde un punto de vista óptico. Por ejemplo, en paneles decorativos de gran superficie, incluso después de estirarlos o tensarlos, es difícil conseguir una superficie completamente lisa, lo que provoca la contracción de los materiales de techado metálicos.
2. El patrón de malla puede reducir el deslumbramiento emitido por el sol.
③ Si la placa a cuadros tiene pequeños arañazos y hendiduras en áreas pequeñas, no es obvio.
④ Aumentar la resistencia de la placa de acero.
⑤ Ofrecemos a los arquitectos diversas opciones. Entre los diseños patentados se incluyen tela (utilizada en el Ed Building de Londres), mosaico, perla y cuero. También están disponibles diseños muaré y lineales. La superficie texturizada es especialmente adecuada para la decoración de interiores, como paneles de ascensores, mostradores, revestimientos de paredes y entradas. Para aplicaciones exteriores, se recomienda tener en cuenta que el acero inoxidable se puede limpiar con agua de lluvia y lavado manual, evitando así la acumulación de suciedad e impurezas en rincones donde se produce corrosión y se deteriora su apariencia.
10. Procesamiento de superficies rugosas
El desbaste es uno de los procesos de acabado superficial más comunes. Consiste en pulir o abrillantar la superficie de una placa de acero pulido o recocido brillante con una banda o cepillo abrasivo de nailon.
11. Rociar con bola de vidrio o granallar
Para aplicaciones interiores, como los interiores de ascensores, son populares los acabados de superficie mixta. Este proceso híbrido consiste en formar una superficie mate mediante la pulverización de esferas de vidrio, cubrirla posteriormente con una película plástica para obtener una superficie pulida y, finalmente, lograr una superficie mixta pulida y mate. También se pueden utilizar perdigones de acero inoxidable en un proceso similar. Las esferas o gránulos de vidrio empleados no deben haber sido utilizados previamente en otros materiales, especialmente en acero al carbono. Dado que las partículas de polvo de acero al carbono se incrustan en la superficie del acero inoxidable, pueden provocar corrosión. También se pueden utilizar esferas de cerámica como material de pulverización.
12. Acero inoxidable coloreado. El proceso de coloración del acero inoxidable fue desarrollado con éxito por International Nickel Corporation (INCO) en la década de 1970, y numerosas empresas cuentan con licencias para su uso. Como se explicó anteriormente, la razón por la que el acero inoxidable no se oxida es la película inerte de óxido de cromo que recubre su superficie. El proceso de coloración utiliza esta capa para formar un color específico. Gracias a esta película siempre presente, el acero inoxidable no se decolora ni requiere un mantenimiento frecuente como la pintura. El acero inoxidable coloreado también puede procesarse, incluso en curvas pronunciadas, sin que el color se vea afectado negativamente. En cuanto a su impacto en la resistencia a la corrosión, las pruebas demuestran que esta mejora tras la aplicación de este proceso. El proceso está estrechamente relacionado con el tiempo de aplicación, y el color cambia con el tiempo. El orden de cambio de color es: marrón, dorado, rojo, púrpura y verde. Una característica especial de este proceso es que su apariencia final puede reflejar la superficie original del material; es decir, una superficie pulida o con acabado espejo adquiere un intenso brillo metálico, mientras que el color de una superficie rugosa es mate. Proceso: Este proceso consiste en sumergir el acero inoxidable en un tanque de solución. La solución contiene preferiblemente 250 gramos de Cr₂O₃ por litro, aunque también se aceptan 490 gramos de ácido sulfúrico por litro. La temperatura oscila entre 80 y 85 °C, y el tiempo de inmersión depende del color deseado, sin exceder los 25 minutos. Tras enjuagar la placa de acero con agua fría limpia, se introduce a temperatura ambiente en una solución con una concentración de 250 g/l de ácido clorhídrico y 2,5 g/l de ácido fosfórico para el tratamiento catódico. El tiempo es de aproximadamente 10 minutos, con una densidad de corriente de 0,2 a 0,4 A/dm². Para evitar daños, se endurece inmediatamente después del tratamiento, se enjuaga con agua caliente y se seca.
13. Acabado de superficies mixtas: El acero inoxidable coloreado puede diseñarse con patrones. La tecnología patentada desarrollada consiste en eliminar el exceso de material mediante una banda abrasiva de corindón, logrando así una combinación entre la belleza natural de la placa de acero y el color del patrón. Esta superficie es resistente a las huellas dactilares y resulta especialmente adecuada para la decoración de interiores. Los fabricantes de pulido pueden proporcionar muestras del proceso de acabado.
14. Procesamiento de superficie mediante grabado El patrón se marca en la superficie de la placa de acero a través del proceso de recubrimiento, y luego la placa de acero se sumerge en una solución de ácido de cloruro férrico (grado o) para grabar la parte no recubierta, formando un hermoso patrón en la superficie del acero inoxidable.
Fecha de publicación: 21 de junio de 2023