El recubrimiento anticorrosivo es una capa uniforme y densa que se forma sobre la superficie de las tuberías de acero oxidadas, aislándolas de diversos medios corrosivos. Los recubrimientos anticorrosivos para tuberías de acero utilizan cada vez más materiales o estructuras compuestas. Estos materiales y estructuras deben poseer buenas propiedades dieléctricas, propiedades físicas, estabilidad química y un amplio rango de temperatura.
Recubrimientos anticorrosivos para paredes exteriores: Tipos y condiciones de aplicación de recubrimientos para paredes exteriores de tuberías de acero. Recubrimiento anticorrosivo para paredes interiores: Esta película se aplica a la pared interior de las tuberías de acero para evitar la corrosión, reducir la fricción y aumentar la resistencia al flujo. Los recubrimientos más comunes son la resina epoxi curada con amina y la resina epoxi de poliamida, con un espesor de 0,038 a 0,2 mm. Es fundamental asegurar una firme adherencia del recubrimiento a la pared de la tubería.
El tratamiento superficial debe realizarse en la pared interna de la tubería de acero. Desde la década de 1970, se utiliza el mismo material para recubrir tanto la pared interna como la externa de las tuberías de acero, lo que permite recubrirlas simultáneamente. Los recubrimientos anticorrosivos y de aislamiento térmico se utilizan en tuberías de acero de pequeño y mediano diámetro para el transporte de petróleo crudo o fueloil, con el fin de reducir la disipación de calor de las tuberías al suelo.
Se añade una capa compuesta de aislamiento térmico y anticorrosión al exterior de la tubería de acero. El material aislante térmico más común es la espuma rígida de poliuretano, cuya temperatura de funcionamiento óptima es aquella en la que este material es blando. Para aumentar su resistencia, se aplica una capa de polietileno de alta densidad en el exterior del aislamiento, formando una estructura compuesta que impide la penetración de agua en el aislamiento.
Fecha de publicación: 18 de julio de 2023